A nivel local, las familias peruanas ya se encuentran inmersas en los preparativos para las celebraciones navideñas, un momento que combina tradición, gastronomía y convivencia. Como cada año, la cena de Nochebuena se convierte en tema de conversación y debate, con el protagonismo indiscutible de platos como el pavo horneado o el lechón al horno, acompañados de purés, ensaladas y guarniciones que varían según la región y las costumbres familiares.
La cena de Nochebuena: tradición y debate
El pavo ha sido históricamente el plato central de la mesa navideña peruana, símbolo de abundancia y celebración. Sin embargo, en los últimos años el lechón ha ganado terreno como alternativa igualmente festiva, especialmente en zonas rurales y en familias que buscan sabores más intensos y tradicionales. Este debate entre pavo o lechón refleja la diversidad cultural y gastronómica del país, donde cada hogar adapta la cena a sus preferencias y posibilidades.
Los acompañamientos también forman parte de la tradición: puré de manzana, ensalada rusa, arroz árabe y diversas salsas caseras complementan la cena, creando un mosaico de sabores que se repite año tras año en las mesas peruanas.
El panetón: símbolo infaltable de la Navidad
Si hay un producto que une a todos los peruanos en estas fechas, es el panetón. Este bizcocho de masa esponjosa, con frutas confitadas y pasas, se ha convertido en el verdadero símbolo de la Navidad en Perú. Consumido tanto en la cena como en los desayunos y meriendas de diciembre, el panetón es considerado un elemento indispensable de la celebración.
Las principales marcas nacionales producen millones de unidades cada temporada, y su presencia en los hogares es casi universal. Sin embargo, la tradición también ha dado paso a nuevas tendencias: panetones artesanales, versiones con chocolate, sin frutas confitadas o con ingredientes locales como quinua y cacao amazónico.
Panetones de lujo: un fenómeno reciente
En paralelo a la oferta masiva, se ha reportado la venta de panetones de lujo que superan los S/800 por unidad. Elaborados por pastelerías exclusivas y chefs reconocidos, estos productos buscan diferenciarse por la calidad de sus ingredientes, el tiempo de fermentación y la presentación sofisticada. Harinas importadas, mantequilla europea, frutas deshidratadas premium y empaques de diseño convierten al panetón en un artículo de lujo para un segmento reducido del mercado.
Este fenómeno refleja cómo la tradición puede adaptarse a nuevas tendencias de consumo, donde el panetón deja de ser solo un producto popular para convertirse también en un símbolo de exclusividad.
Una celebración que une
Más allá de las diferencias en los menús o en el tipo de panetón elegido, la Navidad en Perú sigue siendo un momento de unión familiar y comunitaria. Las cenas de Nochebuena, los intercambios de regalos y las reuniones en torno al panetón y el chocolate caliente refuerzan el sentido de pertenencia y tradición.
La preparación de la Navidad en Perú combina tradición y modernidad. Entre el debate del pavo o el lechón, la omnipresencia del panetón y la aparición de versiones de lujo, los peruanos celebran estas fiestas reafirmando su identidad cultural y gastronómica, con la mesa como el verdadero centro de la celebración.



